El “para qué” de la Psicopedagogía

“Mi hija va a la psicopedagoga”; “Con la psicopedagoga juega”, “Tiene que hacer tarea para mañana”, “hoy no quiso hacer nada en el cole”, “no copió”; estas son algunas de las cosas que se oyen en las consultas…entonces, una psicopedagoga juega, hace tareas, enseña?

La psicopedagogía abarca un amplio espectro de actividades relacionadas con los procesos de aprendizaje a lo largo de la vida.

Básicamente se ocupa de las características del aprendizaje humano: cómo se aprende, cómo ese aprendizaje varía evolutivamente y está condicionado por distintos factores, cómo y porqué se producen las alteraciones del aprendizaje, cómo reconocerlas y tratarlas, qué hacer para prevenirlas , cómo promover procesos de aprendizaje que tengan sentido para el paciente y su entorno, entre otros múltiples temas.

Esta disciplina abarca un amplio espectro de actividades relacionadas con los procesos de aprendizaje de las personas El quehacer del psicopedagogo se encuentra en la articulación entre salud y educación, sin intentar una decisión estática, ya que en el movimiento entre estos dos pilares es que la tarea cumple con su objetivo. La idea es integrar salud y educación, no para unirlas, sino para ampliar la visión y la reflexión de quienes intentamos comprender a aquellos que aprenden de manera diversa.

Los desafíos que hoy transitamos los que nos dedicamos a esta profesión, nos comprometen a encontrar las intervenciones más adecuadas. 

Debemos adentrarnos en el contexto que abarca a cada individuo, intentando una mirada desde un modelo más ecológico. 

Antes de meterse de lleno en cómo afrontar los problemas de aprendizaje, el psicopedagogo trata de detectar en el paciente aquellos patrones, comportamientos o factores que podrían estar alterando negativamente su capacidad cognitiva.

Todos necesitamos ayudas: estas ayudas pueden ser, personas que nos guían; pueden ser estrategias didácticas para crear entornos educativos significativos; pueden ser andamiajes para favorecer la autonomía, el autocontrol y los procesos de autorregulación. Las ayudas son en definitiva herramientas para disminuir las barreras que dificultan el aprendizaje, son herramientas para mejorar nuestra calidad de vida.

Entonces…qué hacer frente a la frase “Deberían consultar con una psicopedagoga”. En principio no alertarnos, pensarlo como el comienzo de un camino que puede abrir nuevos horizontes, nuevas posibilidades, que harán de este tiempo un momento de mayor comprensión al entender lo que está sucediendo.

Las consultas son por lo común derivadas a partir de una señal de alerta dada por los maestros, a veces por los mismos padres, o por otros profesionales.

Las causas pueden ser múltiples y variadas; niños que no adelantan en sus adquisiciones evolutivas, dificultades en el proceso de adquisición de la lecto-escritura, lentitud o fracaso en su aprendizaje escolar, fallas en el razonamiento lógico, dificultades de atención y concentración, fallas en las funciones ejecutivas, rechazo a todo lo relacionado con el aprendizaje, conductas oposicionistas-desafiantes, etc. 

La clave es armar un buen diagnóstico que debería funcionar como brújula orientadora, y ser lo suficientemente plástica como para ir modificándose de acuerdo al trabajo que se va realizando. 

 Entender a este sujeto con su peculiaridad única, su historia personal, sus predisposiciones y el sentido actual que adquieren los síntomas. Desde esta mirada, no existen generalizaciones fáciles, técnicas infalibles, ni formulaciones de recetas. 

Hay que tener un poco de artista, actor, pintor para ir moldeando cada situación como única e irrepetible.

Luego de mucho tiempo dedicándome a esto, agradezco haber elegido esta profesión, esta tarea que implica un desafío permanente, que nos enfrenta con el sufrimiento humano y nos brinda la posibilidad de entender, acompañar y dar la oportunidad a todos de ser libres en su modo de ser, actuar y transitar este mundo.

Lic. Viviana Esteves

MP 137214 | Psicopedagoga | Coordinadora Área Psicopedagogia Domus